Poppet vivía con otros perros frente a un supermercado. Los vecinos daban de comer a los perros. Los otros perros ya fueron rescatados hasta que Poppet también pudo ser rescatado y fue llevado a Melampo.
Poppet no confiaba en la gente en absoluto. Cuando llegó al campamento, no dejó que nadie se le acercara. Poppet es tímido pero también sensible. Con cada día que pasa ha podido superar su miedo poco a poco y cada día está un poco más cerca. Mientras tanto, ya es posible acariciarlo y curar sus heridas. No pasará mucho tiempo antes de que podamos abrazarlo de verdad.
Tiene un gran carácter, sale en un grupo grande, con machos y hembras, siempre evita problemas. Cada día es más sociable y obedece inmediatamente cuando los ayudantes le piden que regrese a su caseta, después del recreo. Poppet ya camina bien con correa.
Para Poppet, buscamos personas especialmente tranquilas y pacientes que trabajen ganarse su confianza. Dado que es casi seguro que nunca antes ha vivido en un hogar, todavía hay mucho que aprender. Al principio, todos los sonidos, olores y reglas en un hogar que a menudo damos por sentado serán nuevos.
Buena suerte Poppet, que encuentres a tu familia perfecta.