Odin vino a Melampo porque su dueña enfermó, y su familia no pudo acoger a Odín. Sufre de displasia de cadera y cristales en la orina, por lo que se le dan alimentos y suplementos especiales para las articulaciones.
Quién sabe qué le pasó tras las rejas, o por la pérdida de su hogar tras 8 años haya sido traumática, ya que cuando llego se mostraba algo ansioso y ladraba cuando estaba encerrado. Sin embargo, tan pronto sale al recreo es un perro dulce y cariñoso. Odín sale en gran grupo con otros perros y se lleva bien con sus compañeros perros.
Actualmente ha evolucionado magníficamente. Ha cambiado y se ha convertido en en un compañero equilibrado y optimista a traves de la interación con los voluntarios. Es cariñoso, tranquilo y muy sociable. Tiende a corregir el comportamiento de otros perros in entrar en discusiones. Ya no ladra tras la reja y se muestra mas relajado
Le encanta el agua y jugar con el agua de la manguera. Se puede cepillar y examinar sin ningún problema. Ha sido capaz de deshacerse de sus antiguos actitudes negativas.
Odín está listo para vivir feliz, en un hogar tranquilo como perro único o compañeros tranquilos